Están ahí desde hace unos 18.000 años. El Perito Moreno, así como los alrededor de 200 glaciares que asoman en la zona de El Calafate, nacieron en el último período de glaciación. Y desde entonces, conservaron su encanto. Esa magia interminable que fascina a quienes llegan a este destino del país, refulge de blanco en días soleados y se sumerge en una bruma misteriosa cuando la Patagonia se pone gris de ventiscas.
El ingreso a El Calafate es parte del encanto cuando se divisa la ciudad junto al Lago Argentino. Aquí, la gran cantidad de atractivos le harán descubrir a los viajeros su importancia a nivel global. De hecho, la visita al Perito Moreno -cuya superficie es de 250 kilómetros cuadrados- es una de las tantas alternativas que brinda el Parque Nacional Los Glaciares a los visitantes.
El Calafate es el lugar por excelencia del turismo en Santa Cruz. Con el Parque Nacional a unos 80 kilómetros de la ciudad, a partir de allí se despliegan los clásicos productos enfocados en los viajeros. Van desde las vistas panorámicas y el recorrido por las pasarelas para sorprenderse con el frente del Perito Moreno, hasta las caminatas sobre los hielos con guías especializados, además de un gran abanico de posibilidades que los emprendedores de esta villa de montaña han desplegado a lo largo de estos años.
#Jueves Hermosa Mañana.
La reserva natural Laguna Nimez a orillas del Lago Argentino es un lugar ideal para disfrutar en un paseo en familia. pic.twitter.com/jwTDcaulfH— El Calafate (@ElCalafateOK) November 14, 2019
Las navegaciones, por su parte, varían en cuanto a su duración. Pueden ser desde una hora hasta el día completo, como el clásico (con reserva) viaje hacia el glaciar Upsala, cuya superficie es de 870 kilómetros cuadrados, y la visita a Estancia Cristina, donde trekkings, excursiones 4×4 y cabalgatas forman parte del plan.
En tanto, la Laguna Nimez, ubicada a sólo un kilómetro de la ciudad, es el área natural más cercana al centro de El Calafate. Flamencos, cauquenes, cisnes y teros son parte del mundo ave en este sitio. Las estancias turísticas en los alrededores, el Lago Roca a 50 kilómetros, las cuevas del Walichu con manifestaciones en pinturas que datan de los 4000 años antes de Cristo y la pesca deportiva integran también la ruta turística por esta joya natural del sur argentino.