Por Prof. Dr Claudio Santa María (MN: 96.332)
Rector de la Fundación wwww.cienciasdelasalud.edu.ar
La pandemia de coronavirus que comenzó en diciembre de 2019, y que nos tiene a todos los seres humanos involucrados, encuentra hoy a la Argentina con una difícil situación.
Pero, ¿cuál es la buena noticia? Un resumen sobre 5 ensayos de las vacunas en su Fase 3 concluye: dan protección al 100% contra la muerte y las hospitalizaciones, según cuenta el Doctor Eric Topol, reconocido genetista e investigador estadounidense. Las vacunas funcionan.
¿Cuáles son las otras noticias? Tenemos oficialmente en la Argentina más de 2.100.000 casos positivos de coronavirus; superamos los 52.000 muertos y 3.500 personas pelean por su vida internadas hoy en terapia intensiva.
En este contexto, y debido al mal manejo de la pandemia, hemos adquirido pocas vacunas, de las millones que nos prometió el ex ministro Ginés González García, reemplazado por el escándalo de los vacunados Vip. Pero, en verdad, hay 3 tipos de vacunas recibidas.
Sputnik V, de las que se recibieron en total 1.220.000 dosis, sólo el 6% del contrato; Covishied. AstraZeneca/Oxford, de las que se cuentan 580.000 o el 2,6% de lo acordado; y las recientes 904.000 dosis de Sinopharm.
El total de población de riesgo para vacunar es de 15.591.000, pero sólo hay vacunas de dos dosis hasta hoy para 1.352.000 argentinos.
Con estas dosis disponibles, ¿cuáles son las prioridades para vacunar? Según el plan del Ministerio de Salud en diciembre de 2020, el orden de prioridad para vacunar es en primer lugar personal de salud públicos y privados. En total, son aproximadamente 763.000 personas.
En segundo lugar, adultos mayores de 70 años y quienes viven en establecimientos geriátricos, y luego adultos mayores de 60 años. El total de adultos que son mayores de 60 o viven en geriátricos son alrededor de 7.375.000 personas.
En cuarto orden de prioridad está el personal de las Fuerzas Armadas, de Seguridad y de servicios penitenciarios, un total 500.000 miembros; en quinto lugar, adultos de entre 18 y 59 años que presentan factores de riesgo, otras 5.653.000 personas.
En sexto puesto se suma el personal docente y no docente de los niveles educativos inicial (jardín), primaria y secundaria. Un total de 1.300.000 personas y, finalmente, otras poblaciones estratégicas.
Situación #COVID19 en Argentina
Confirmados: 6.164 | Total: 2.201.886 casos
Fallecidos: 166 | Total: 53.836
Ocupación camas UTI: 3.479
Porcentaje ocupación total camas UTI adulto:
– Nación: 54,2%
– AMBA: 58,6%Reporte completo🔻https://t.co/be4GiHOwpj
— Ministerio de Salud de la Nación (@msalnacion) March 15, 2021
Así, el total de población de riesgo para vacunar es de 15.591.000, pero sólo tenemos vacunas de dos dosis hasta hoy para 1.352.000 argentinos.
En cuanto al total de vacunados en el país desde el inicio del plan de vacunación hasta el 25 de febrero, se aplicaron a 558.831 personas la primera dosis, y
271.001 personas vacunadas con la segunda dosis.
Sólo se aplicaron 829.832 dosis, de los 2.704.000 de dosis totales que tenemos, lo que refleja que es muy lento el plan de vacunación.
La situación hoy permite advertir que cambiaron el plan estratégico, de las siete prioridades, para calmar la bronca e indignación de la población por el escándalo del vacunatorio VIP. El Gobierno anunció el comienzo de la vacunación para los docentes, pero no hay vacunas suficientes.
Hay que vacunar 15.591.000 personas según las prioridades, pero tenemos solamente vacunas para muy pocos, con el dato de que el 81 % de los fallecidos en Argentina, son mayores de 60 años.
Según el Monitor Público de Vacunación, al 25 de febrero de este año habían vacunado a 15.499 personas estratégicos, en verdad su gran mayoría VIP. Des-
de que llegaron las vacunas a finales de diciembre 2020, hasta hoy murieron más de 9.000 argentinos y entre ellos 44 profesionales de la salud. Si no se hubiesen vacunado, las personas VIP, parte de esos fallecidos argentinos estarían vivos.
¿Qué hay que hacer ahora? Terminar de vacunar sin duda a todo el personal de salud y a todos los mayores de 60 años donde encontramos el 81% de mortalidad. No más vacunados VIP, que paguen una cuantiosa multa económica por colarse y que esperen a su segunda dosis, cuando todos los argentinos prioritarios estén vacunados.
Hacer una gestión transparente. Conseguir más vacunas para todos, anteponiendo el bien común y no la ganancia de algunos pocos. Mientras tanto, todos usamos barbijo, mantenemos distancia de dos metros y ventilamos los ambientes. Nos merecemos una vida mejor.